miércoles, 29 de octubre de 2008

Dangerously drunken

Creo que no es divertido que un borracho te acose.
Lo pienso desde la óptica de los amigos de mi hermano que cuando llegue a casa media pálida, media muerta de miedo, se reían de lo sucedido.
Desgraciadamente debo viajar a diario para ir a clase. 75 km me separan del instituto donde estudio Publicidad.
Hoy como mi novio tenia sueño me volví antes para que pueda descansar.
En la mitad del recorrido se subió un hombre que no solo estaba borracho (y probablemente drogado) sin que además de alcohol olia a mugre.
Yo, como siempre, venia profundamente dormida, en eso siento que me revolean la mochila encima y se me sienta este "desubicado" al lado. Me pareció totalmente de mal educado lo hecho, pero no dije nada.
Pasado un rato y después de cantos alegóricos a no se quien porque se le entendía menos de 1/4 de lo que decía entre puteadas, insistía a que mirara su celular, no conforme con mi respuesta prosiguió a preguntarme si estaba enojada con él, luego a confesarme su amor y a pedirme que lo besara en la boca.
Del miedo (tenia todo el aspecto de un borracho violento) e intentando no ofuscarlo me banque casi contra el vidrio los km que aun faltaban sin gritar.
Planeaba hablar con el chofer cuando me bajara pero él no tuvo mejor idea que bajar conmigo, aún cuando no era a mi ciudad donde iba.
Mi hermano no había llegado aún a buscarme y yo presa de la desesperación, veo dentro de un auto al papá de un chico que viaja conmigo todas las tardes y le conté lo sucedido y me refugié en su auto hasta que me pasaron a buscar.
Es tan solo un mal recuerdo, pero la sensación aun está y tengo impregnado su olor. Que asco!

2 comentarios:

Unknown dijo...

que garron viajar con un borracho, y que buena onda el padre de tu amigo.
es bueno a veces desahogarse, si lo sabre yo...

Blonda dijo...

Me dio asquito ajeno como quien dice...jeje.

Besotes! =)