Los días corren y se acerca lo que tanto temía. Tu encuentro con ella.
No es una tontería, ni una exageracion de mi parte, mi preocupación.
A pesar de ser yo la que duerme a tu lado todas las noches y la quete ama ahora, sinceramente no puedo ponerme a la altura que siempre la pusiste a ella.
Tus dudas sobre que vas a sentir, que va a pasar, son como si fueran cuchillos atravesándome.
Y porque? porque yo te elegí para ser mi hombre, mi compañero, mi todo.
Y vos hoy tenes dudas.
Y yo donde quedo? ahí...en la nada, llorando por tu amor, porque no es mio.
Creo que a esta altura nunca lo fue.
Y duele terriblemente haber sido un mientras tanto, un parche, una compañía entre tanta soledad, porque para mi fuiste todo. Presente y futuro.
Por descuido la perdiste a ella, ahora, por eso que perdiste...me perdes a mi.
Me voy tranquila, sabiendo que di todo lo que pude dar y que te ame y que te respete y que podría haber sido mucho mas, mucho mejor.
Pero hay veces que las cosas están destinadas a no ser.
Y ahora a ver como se aprende a dormir sola otra vez y a intentar no llorar, a que el dolor no quiebre y a enfocar la cabeza en lo que realmente importa.
Tengo una vida por delante y no voy a quedarme acá sentada a verla pasar.
El dolor no puede durar para siempre.
No?
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